9. Ermita de Tinizara – Refugio de Tinizara

Las cruces protectoras

En Tijarafe, las cruces prácticamente guían y acompañan a los caminantes. Tinizara es reflejo de ello. Unas veces ofrecen protección a las personas, otras se usan como símbolos festivos y otras recuerdan pérdidas de seres queridos.

Entre las cruces que jalonan los caminos, encontramos una muy especial, habitualmente enramada y decorada en celebraciones por el alumnado de la pequeña Escuela de Tinizara, en la que muchos y muchas aprendieron el abecedario, a contar o asistían a catecismo. La cruz que viste un pequeño nicho frente a la escuela es conocida como la Cruz de los Niños.

Descripción

Camino ascendente plagado con múltiples muestras de arquitectura tradicional rural: patrón básico de planta rectangular, paredes gruesas de piedra seca, carpintería de madera de tea y cubierta de teja de cuatro aguas.

Destaca la Zona Recreativa Llano del Lance de reciente construcción, rodeada de pinares ofrece un entorno tranquilo y acogedor. El final del trayecto permite apreciar un hermoso paisaje marcado por el cultivo de viñedo, muy cerca del Refugio de Tinizara.

Recomendaciones

Hay que considerar la posibilidad de hacer este sendero de ida y vuelta (en trayectoria ascendente primero para bajar todo lo que se ha subido después), u organizar la recogida antes de empezar en algún punto del camino.

Conexión con otros senderos

La Ermita de Tinizara es parte del trazado del Sendero Número 8.

El sendero

0h 00’ 00” 891 m.s.n.m. Ermita de Tinizara. Para comenzar el sendero accedemos a la ermita de Tinizara por un desvío que se encuentra al final de la última recta que hace la carretera LP-1 antes de llegar a Garome en dirección Puntagorda. A mano izquierda veremos un pequeño grupo de casas con un supermercado y un bar, pasado el cual está el desvío hacia abajo por una pista asfaltada flanquedada por viviendas. A 110 metros, a mano derecha, se verá la ermita, junto a la cual podremos aparcar si no hemos querido hacerlo en la carretera general o llegar en guagua hasta la parada de la plaza de Tinizara.

La ermita, precedida por una pequeña plaza, está dedicada a la advocación del
Sagrado Corazón de Jesús. Es un edificio reciente, terminado en 1954, por el
impulso de una maestra nacional que cedió los terrenos y buscó dinero para hacer
la edificación.

Iniciamos el sendero caminando rumbo sur por la pista asfaltada (camino Tinizara) que desciende en suave pendiente. En este tramo, estamos realizando una parte del Camino Real de la Costa (GR 1 30).

0h 04’ 00” 877 m.s.n.m. Cruz de Tinizara. A unos 180 metros, a mano izquierda, dentro de un amplio nicho entejado, encontramos la Cruz de Tinizara, cuya historia se narra en el sendero número 8, Tierras Viejas-Mirador de Garome.

Las cruces acompañan a los caminantes en casi todos los senderos de Tijarafe,
brindando protección a las personas o recordando hechos luctuosos. Pero también
eran motivo de reunión festiva de los vecinos de los pequeños asentamientos
rurales. Fieles a la costumbre palmera, el día de la fiesta (generalmente el tres de
mayo, aunque ahora podemos ver fiestas de cruces hasta agosto) se enrama la cruz
con flores y prendas (joyas), y se viste con telas de colores.

0h 10’ 26” 869 m.s.n.m. Cuatro Caminos. A 150 metros de la Cruz de Tinizara encontramos, a mano izquierda, el cruce del camino vertical que iba de costa a cumbre con el camino horizontal en dirección a Los Llanos. Vamos a tomar el primero, señalizado como PR LP 12.1 “Refugio Tinizara-Roque de Los Muchachos”. Abandonamos, pues, la pista asfaltada y tomamos una pendiente empedrada que discurre flanquedada por huertas y viviendas, en dirección este.

0h 13’ 27” 878 m.s.n.m. A 20 metros del cruce, a la izquierda del camino, encontramos un ejemplo de vivienda rural tradicional. A lo largo de todo el camino podremos disfrutar de diversas muestras de esta arquitectura íntimamente relacionada con su entorno natural y cultural. En este caso contemplamos un patrón básico de planta rectangular, paredes gruesas de piedra seca, carpintería de madera de tea y cubierta de teja a cuatro aguas.

0h 16’ 55” 887 m.s.n.m. Entre dos viviendas de reciente construcción el sendero se cruza con la carretera general LP1. Al otro lado de la carretera vemos fácilmente la continuación del sendero por una rampa empedrada, junto a la que se encuentra un gran cartel de la red insular de senderos. El camino sube entre viviendas, huertas y jardines que todavía recuerdan la importancia que tenía este sendero en la comunicación de la antigua población de Tinizara.

0h 18’ 39” 901 m.s.n.m. A mano izquierda observamos una era donde antiguamente se trillaban los cereales y las leguminosas. Continuamos ascendiendo. El camino se torna pavimentado de cemento.

Antes de llegar el agua corriente a Tijarafe, los campos producían en secano y los
cereales constituían una producción básica para las familias; hay que recordar la
importancia del gofio en la dieta campesina. Por ello quedan eras diseminadas por
todo el municipio. Antaño el suelo era de tierra apisonada pero más tarde se puso
de cemento.

0h 21’ 50” 912 m.s.n.m. A mano derecha encontramos otra cruz. A la izquierda tenemos otro ejemplo de arquitectura tradicional en la que, esta vez, la planta es en forma de L, lo que supone un paso más para alcanzar la planta cuadrangular con patio en medio propia de las viviendas de los más ricos y que podemos contemplar, por ejemplo, en la Casa del Maestro.

0h 25’ 03” 927 m.s.n.m. Cruce con pista asfaltada (Camino Los Riveroles). A la derecha, hermosa casa tradicional que creció en altura y muestra dos plantas divididas por un sollado de tea. En la fachada podemos ver los tradicionales balcones de madera.

Contiguo a la casa se encuentra un aljibe con piletas. Hasta mediados del siglo XX no había más agua en Tijarafe que la de algunas fuentes y la de la lluvia que se aprovechaba hasta la última gota.

La función de los aljibes era recoger y almacenar el agua de la lluvia para consumo
humano. El esquema clásico consiste en un estanque cuadrangular cerrado con
tablones de madera con un brocal cúbico, también de madera, para sacar el agua
con un balde. Con frecuencia se encuentran adosadas unas piletas para lavar la
ropa.

A lo largo del camino encontraremos más ejemplos de aljibes y de cómo han sido reformados con cubiertas de cemento. Continuamos recto hacia arriba, en dirección este, por la pista.

0h 30’ 20” 946 m.s.n.m. A 160 metros, el camino se aparta de la pista a mano izquierda, justo por encima de una vivienda, por una rampa que a trozos conserva todavía el antiguo empedrado. Hay que estar atentos a este desvío porque puede estar tapado por coches particulares aparcados delante. Pasado un depósito de agua y unos cultivos de viña a la derecha y justo después de una vivienda a la izquierda.

0h 33’ 22” 961 m.s.n.m. Cruce con el camino Los Riveroles. Seguimos de frente por el camino empedrado con fuerte pendiente. Este camino no transcurre en “vueltas”, haciendo zigzags para suavizar la pendiente, sino que ataca la lomada prácticamente en línea recta, permitiéndose sólo un par de curvas suaves, ya que este sendero se utilizaba para bajar madera del monte.

Los troncos se enganchaban a bestias de tiro (normalmente vacas) y se bajaban
arrastrando por lo que el camino debía ser lo más recto posible para facilitar esta
operación.

0h 36’ 35” 990 m.s.n.m. Escuela de niños de Tinizara. Ciento veinte metros más arriba encontramos, a mano izquierda, la antigua escuela de Tinizara.

Antes de construirse la carretera general, a mediados del siglo XX, todos los
desplazamientos se hacían a pie o a caballo, cuando el sendero lo permitía, por
estos caminos que hoy recorremos por deporte o por placer. Por ello se agrupaban
la mayor cantidad posible de servicios en los pequeños asentamientos rurales, y las
escuelas eran uno de ellos. Hoy sólo hay un colegio en El Pueblo y una escuela
unitaria en La Punta pero antiguamente había pequeñas escuelas diseminadas por
los barrios en las que se enseñaban las primeras letras, a contar, a sumar y el
catecismo. Había escuelas de niños y escuelas de niñas.

Frente a la escuela hay un pequeño nicho que alberga la Cruz de los Niños, atendida en su tiempo por los alumnos de la escuela. El camino se encuentra flanqueado por almendreros, un cultivo importante en su tiempo para Tijarafe y que, todavía hoy, colorea el paisaje con sus pequeñas flores blancas a finales de enero.

0h 41’ 06” 1019 m.s.n.m. El Topito. A la izquierda encontramos el nicho de la Cruz del Topito.

Su fiesta, una de las más importantes de Tijarafe, se celebra el primer fin de
semana de agosto, conocida también como fiesta de las Papas Asadas por ser
tradicional el reparto de papas asadas el último día de la fiesta en el pequeño llano
que hay detrás del nicho de la cruz.

0h 44’ 01” 1030 m.s.n.m. En la bifurcación en forma de horquilla, tomamos el ramal de la derecha por una suave subida empedrada. Nos dirigimos hacia una masa de pinar. A ambos lados del camino crecen las jaras (cistus monspeliensis), arbustos de medianías y alturas moderadas que en primavera nos ofrecen un bello espectáculo con sus flores blancas.

0h 46’ 46” 1045 m.s.n.m. Cruce con una pista sin pavimentar. Continuamos recto hacia la masa de pinos. Vemos cultivos de viña conviviendo con el pinar.

0h 49’ 15” 1056 m.s.n.m. Hoya Martín. A la izquierda hay un cruce con una pista privada. Continuamos ascendiendo (dirección este) y nos adentramos en la sombra de los pinos.

El pinar es un elemento característico del paisaje tijarafero. Los pinos canarios
(pinus canariensis), resistentes al fuego, eran una fuente importante de recursos
como la madera (la afamada tea), la brea o el pinillo.

0h 53’ 26” 1077 m.s.n.m. Zona Recreativa Llano del Lance. Esta zona recreativa de reciente construcción ofrece un ambiente tranquilo y acogedor a la vez que integrado con la naturaleza que las rodea. Cuenta con cocinas, baños públicos, agua potable, parque infantil, mesas familiares y amplia zona de aparcamiento. El sendero continúa hacia la derecha, coincidiendo con el sendero autoguiado “Un pinar superviviente” de la red de senderos de La Palma (http:// www.senderoslapalma.com).

0h 58’ 05” 1111 m.s.n.m. Cueva Honda. Cruce con pista de tierra horizontal. Seguimos recto. Sendero ancho con empedrado a trozos bajo el pinillo.

0h 59’ 54” 1126 m.s.n.m. El topo del viejo Pérez. Tras subir una escalinata de piedra, encontramos a la izquierda una curva asfaltada del camino de Los Riveroles. El sendero sube tangente a esa curva, siguiendo el margen del barranco de la Baranda.

1h 06’ 11” 1164 m.s.n.m. Llano de la Peseta. Abandonamos el sendero autoguiado por una subida pavimentada de cemento que nace de una curva del camino de Los Riveroles. Hemos salido a un claro de los pinos y pasamos por cultivos de viñedos. Se cuenta que en este lugar un anciano compró un terreno pequeño por una peseta.

1h 08’ 29” 1184 m.s.n.m. A la derecha hay un cruce con pista privada que ignoramos. Seguimos por la pista de cemento por la que veníamos. Enfrente, encontramos una lomada sembrada totalmente de viñas. Hemos visto por todo el sendero cultivos de viñedo, pero es en esta cota, entre los 1.000 y 1.500 metros, donde se enseñorean del paisaje.

El cultivo de la vid como recurso económico se ha revitalizado en los últimos años,
especialmente con la puesta en marcha de dos bodegas comerciales. La adaptación
a la orografía es la misma que hace quinientos años y deja un paisaje agrario
fuertemente abancalado por las laderas de los barrancos.

A la derecha, en la otra margen del barranco de la Baranda, vemos el Llano de la Leña, cuyo nombre indica el recurso económico que se obtenía allí.

1h 11’ 48” 1192 m.s.n.m. Nos cruzamos nuevamente con el camino Los Riveroles y tomamos a mano derecha, por la suave cuesta asfaltada que bordea la lomada.

1h 14’ 50” 1215 m.s.n.m. Hoya del Lance. Abandonamos la pista asfaltada que continúa por la izquierda y seguimos por la fuerte rampa pavimentada de cemento.

1h 17’ 00” 1250 m.s.n.m. Encontramos por última vez el camino de Los Riveroles y seguimos recto, dirección este, a lo largo de 300 metros sin coger ningún desvío. Contemplaremos un paisaje agrario con viñedos, higueras, almendreros y castañeros, cultivo éste no tan extendido como el de los almendreros pero que sí cuenta con cierta superficie. A la izquierda, el barranco de Garome marca la frontera con el municipio de Puntagorda.

1h 23’ 57” 1256 m.s.n.m. Tomamos por la rampa de cemento que continúa por la derecha, de gran pendiente, siempre recto hacia arriba sin tomar ningún desvío. Caminamos por una zona de cultivo donde dominan los viñedos, almendreros y las cirueleras.

1h 30’ 48” 1327 m.s.n.m. Refugio de Tinizara. Nuestro camino termina aquí, en el cruce con el camino de La Traviesa (PR LP 10). Hacia la derecha, el sendero nos llevaría hasta El Time por la parte alta de Tijarafe. Hacia la izquierda, hasta Puntagorda. Y si siguiéramos por el camino llegaríamos al Roque de los Muchachos, la cima más alta de La Palma.