Esta vivienda tradicional canaria acoge una interesante colección etnográfica. Gran parte del protagonismo se lo lleva un antiguo armazón del Diablo de Tijarafe, que mira hacia la entrada. Alrededor del patio principal, dotado del correspondiente aljibe, pivotan una cocina tradicional y varias habitaciones, dedicadas a temas como la cerámica prehispánica, los bailes autóctonos y los instrumentos musicales. Su estratégica ubicación, en pleno centro de El Pueblo, lo convierte en una visita cómoda y recomendable. Además, la Casa del Maestro alberga la actual oficina de información turística del municipio.